Desde hace varios años escuchamos sobre la Transformación Digital y lo importante es que todas las empresas se suban a ella, porque si no tienen altas posibilidades de desaparecer en poco tiempo.
Cuando hablamos de las empresas, en realidad estamos hablando de las personas que conforman las empresas y es muy importante que sepamos qué competencias necesito yo y mis colaboradores para estar arriba en esta Transformación Digital.
Si nos basamos en el origen de la palabra ”Transformar” según la RAE (Real Academia Española) es “Hacer cambiar de forma a alguien o algo”. En sí, es un cambio y los seres humanos – seres de sociedad – nos enfrentamos a los cambios constantemente; a algunos les gustan más que a otros, pero finalmente como bien dijo Heráclito “lo único constante es el cambio”.
Y ¿qué pasa cuando ese cambio se da en la empresa donde trabajo?… Aquella donde estoy hace más de 3, 5, 10 o más años y me van a cambiar la forma en que yo hago las cosas.
Lo primero que hay que tener es calma; normalmente un cambio de este tipo no es de un día para otro. Las buenas empresas se encargan de que estos cambios estén acompañados por profesionales que los podrán ayudar y orientar en lo que puedan necesitar para aprender estas nuevas “cosas”. Pero créeme, con esfuerzo, el apoyo necesario y el compromiso propio, lo vas a lograr y con ello es donde se manifiesta la primera competencia que debemos intentar desarrollar; la flexibilidad.
Según Martha Alles en su diccionario de competencias organizacionales nos dice que Flexibilidad es “la disposición para adaptarse fácilmente a nuevas circunstancias o situaciones”. Te pregunto ¿en cuántas situaciones de tu vida has tenido que tener flexibilidad sin saber que tenías flexibilidad?, seguramente en muchas. No es fácil decir, se necesitan tales o cuales competencias para estar en la Transformación Digital. Creo que es importante que nos veamos a nosotros mismos e identifiquemos que realmente estas competencias las tenemos, seguramente desarrolladas en menor o mayor grado, pero están ahí.
El aprendizaje continuo es una nueva competencia muy valorada en esta era y claramente está relacionado a lo nuevo que se está instaurando en las organizaciones. Un aspecto que debemos tener en bastante consideración es que ya no hay marcha atrás; nos subimos o nos subimos porque a donde vayamos ya no encontraremos el típico modelo antiguo de empresa que no cambiaba nada en 20 o 30 años. Si queremos seguir en el mercado laboral, y evolucionando profesionalmente, debemos cambiar el chip, y si por alguna razón no queremos cambiar el chip, no seamos stoppers de los que sí quieren hacerlo.
Por otro lado, para hacer que las cosas pasen y que esta transformación se logre, debemos Liderar apoyando los cambios. Detrás de lo que la organización quiere implementar hay una razón de ser, y en muchos casos es no desaparecer del mercado. Cuidemos nuestra comunicación, qué decimos y a quién se lo decimos; nuestras palabras podrían hacer que otras personas rechacen los cambios, pero también que se sumen a esta transformación digital.
Te invito a pensar en estas 3 competencias: flexibilidad, aprendizaje continuo y liderazgo, y analizar qué tanto las tienen desarrolladas en tu organización, y como tú con muchos o pocos años de experiencia podrías ser el movilizador del cambio que se necesita para que esta transformación digital pueda darse de la mejor manera.
En SCO apoyamos a organizaciones a realizar su Transformación Digital a través de la implementación de Soluciones SAP con nuestros servicios de consultoría caracterizado por un equipo de profesionales con vasta experiencia y conocimientos. De igual forma, apoyamos esta transformación con nuestro servicio de gestión del cambio para lograr una verdadera adopción tecnológica.
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